domingo, 18 de marzo de 2007

"Zapatillas rojas": ser testigo del poder de unos zapatos



Sentarte en la silla del Teatro Madrid para deleitarte con la puesta en escena de “Zapatillas Rojas” supone adentrarse en la atmósfera de la danza española contemporánea. Comienza el espectáculo donde Antonio Canales, Ángel Rojas, Carlos Rodríguez y Fernando Romero trabajan bajo la batuta del director de directores: José Antonio Rodríguez, director del Ballet Nacional. Y estos renombres dan la talla en las tablas.

La referencia de la puesta en escena para nuestra crítica sigue siendo importante; este ballet nos presenta su propia versión donde el directo se funde con fotografías proyectadas, cine y el sonido idiosincrásico de la radio: la radio de los años 40. Un pequeño homenaje a este medio de comunicación, más de compañía que de información.
El marco de la historia es un taller de costura de una tranquila localidad. Donde su propietaria Benita Doré tiene a tres jóvenes chicas: Karen, Susan y Meri trabajando. Las tardes transcurren entre máquinas y ‘bastidores’ teniendo como único entretenimiento la radio y los ensayos de un ballet cercano: ballet dentro del ballet.


Cristina Ayllón, interpretando a Karen, borda el papel de una mujer seducida por un hombre con el único gancho de poseer unos zapatos mágicos que bailan al son de la música de Emilio Galiacho.
”Zapatillas rojas” es en definitiva una producción vanguardista, fuera de lo tradicional, que hay que enmarcar como referente de la danza contemporánea actual. Hasta el 1 de abril en el Teatro de Madrid, para ser testigo del poder de unos ‘zapatos’ y dejarte llevar por su magia.

lunes, 5 de marzo de 2007

Teatralia

La XI edición de teatralia ya ha dado su pistoletazo de salida, desde el pasado 2 de marzo y hasta el 27 se celebra en la comunidad de Madrid este festival dedicado a las artes escénicas, donde el perfil del público es inusual, diferente: los más pequeños se convierten, por unos días, en receptores disfrutandode los eventos del programa.

No se equivoquen, este público es tanto o más exigentes que los adultos. Esta apuesta, tiene funciones educativas: crear un espectador. Un niño que disfruta acudiendo al teatro, amará este arte. Difícilmente lo hará si nadie le enseña a hacerlo. Los padres tienen aquí una función: acompañarles y educarles en este arte.

Además del programa habitual, se han diseñado dos ciclos: uno de creación musical y otro de trabajos escénicos dirigidos al público adolescente. También se ha puesto el punto de mira en el teatro de sombras, con la exhibición de seis montajes de este género y dos exposiciones temáticas.

La viceonsejera de cultura y deportes matizaba que lo que se busca en este festival es “cultivar la afición de los jóvenes por la escena” y “crear nuevos espectadores con espíritu crítico”.
Serán 28 las compañías, tanto españolas como extranjeras, las encargadas de la edición de este año, que contará con 39 espectáculos que se presentarán en 81 escenarios esparcidos por el mapa de la Comunidad. De ellos 16 están en la capital. Una edición, en la que tiene un gran peso el teatro de sombras. Uruguay, República Checa, Portugal, Australia o Madagascar, entre otros dejarán una pequeña muestra de su arte.

Entre los espectáculos propuestos en la agenda merece destacarse el creado por Marcello Chiarenza y Alessandro Serena, inspirado en las grandes obras de la literatura universal en las que el mar es el protagonista. Dejándose capturar por las imágenes que evocan los textos, los creadores han elaborado un recorrido que narra la historia del hombre, sus necesidades primarias, pero también sus encuentros, sus magias y sus sueños.

Los protagonistas de este viaje son una compañía de siete acróbatas formados en la Escuela Nacional de Circo de Cuba junto al actor Emanuele Pasqualini y la cantante Noriko Takano. Los acróbatas cubanos, dotados de una ancestral visceralidad perotambién de una técnica refinada, herencia de su relación con la escuela de circo de Moscú, muestran disciplinas como la pértiga de altísima espectacularidad.

La música compuesta por el maestro Carlo Cialdo Capelli mezcla de ritmos del Caribe y melodías italianas se presenta como una de las características más originales del espectáculo. Esta obra, cuya producción es responsabilidad de Pantakin de Venecia, se estrenó en junio de 2006 en el Festival de Circo Contemporáneo de Grugliasco, en Torino. Enseguida inicio su gira por Bélgica, Francia, Hungría y España, donde ha sido premiado entre las mejores producciones de la Feria Internacional de Teatro de Tárrega.